¿Piensas que el sobrepeso es la consecuencia de una sola variable?

 

Tras cientos de pacientes tratados en la consulta hemos descubierto una frase que suele ser una constante cuando el paciente viene a su visita informativa gratuita: “Yo no como mal, en casa no tomamos fritos” o directamente “Yo no tomo fritos, no sé por qué engordo”.

Da igual que el paciente venga de Valencia capital, que de Torre en Conill, de Llíria, de la Eliana, de Ribarroja o de la Pobla de Vallbona. Incluso los pacientes online de Madrid, Barcelona, Canarias, Londres, Bélgica o Singapur… Todos dicen lo mismo: “Yo no tomo fritos”.

Es decir, muchísima gente realiza una asociación entre tomar alimentos fritos y padecer sobrepeso. A priori no van mal encaminados, ya que la fritura es una técnica culinaria poco saludable. ¡Pero no depende solamente de eso!

Tomar de forma esporádica algo frito no va a repercutir negativamente sobre el estado físico y nutricional del paciente. Sí que lo hará si es una práctica muy habitual.

Existen algunos puntos a tener en cuenta para mejorar la salud con la alimentación:

De todos modos, obtener un correcto estado de salud y físico no depende únicamente de la técnica culinaria (que evidentemente influye), sino que también hay que tener en cuenta diversos factores:

  1. Ver las características del paciente: cada persona es un mundo y es totalmente imprescindible diseñar el menú perfecto para cada individuo. Ejemplo: lo que le va bien a María podría no funcionarle a Ana.
  2. Diseñar un menú correcto tanto en calorías, como en nutrientes. Además no solo se deben valorar cifras, sino que también se deberán escoger alimentos de calidad y unas buenas técnicas culinarias.
  3. Buscar un estado de salud correcto, que ayude a prevenir la aparición de patologías y a combatir las ya existentes. Con ello se pretende conseguir una mejora en la calidad de vida de los pacientes.

Por tanto queda claro que comer bien no depende únicamente de comer frito o a la plancha o al horno, sino que hay otras muchas variables que es totalmente necesario tener en cuenta para conseguir el resultado deseado.

¿Por qué la fritura «engorda» mucho?

Pero ya que hablamos de frituras… ¿Sabes cuál es el motivo por el que aporta más calorías que la plancha por ejemplo? Pues es muy sencillo:

  • Cuando se cocina un alimento, el calor aplicado rompe los enlaces químicos que presenta la estructura del alimento.
  • Por esos enlaces rotos se pierde agua, es decir, el alimento se deshidrata.
  • Como la fritura consiste en bañar el alimento en aceite, dicho aceite entra en el alimento ocupando el lugar que ha dejado libre el agua.
  • En resumen, con la fritura se pierde agua y se gana aceite. Es por ello que aumente considerablemente el valor energético del alimento.

Entonces, ¿qué técnicas culinarias se recomiendan?

 

  • Con una mayor frecuencia se deberá optar por la plancha, el horno, el papillote, asado, hervido…
  • De forma ocasional y esporádica se elegirá la fritura y el rebozado.

Y tu… ¿También te pensabas que bastaba con evitar los fritos?